SANTIAGO
URRUTIA
“LA MEJOR
ENSEÑANZA ES LA DERROTA”
por
Matute
(Salvaje / 3-10-2017)
Antes de cada carrera,
Santiago Urrutia sube al camión, se encierra y espera allí, en su propio mundo
y campana de concentración, a veces escuchando música o ni siquiera, aislado
del bochinche de la pista y por fuera de la tensión previa a la largada.
Enfocado en lo suyo, jamás sintió miedo dentro de un auto. Bajo el casco,
sólo piensa en la carrera y en ganar. Comprendió que para ser el más rápido
debe mantenerse frío.
A los 3 años ya corría en
motocross y desde que se subió a un kart a los 5, no ha abandonado las cuatro
ruedas. Fue el piloto más joven en ganar una competencia en la historia del
karting uruguayo y el más chico en comenzar a competir.
Hace poco se convirtió en
el primer uruguayo en ganar en un óvalo de Estados Unidos y acaba de salir subcampeón
en la Indy Lights 2017, repitiendo el título de la pasada temporada
2016.
Esta entrevista se hizo en Montevideo poco antes de la partida de
Santiago Urrutia para Estados Unidos, donde además de vivir y competir, ahora
trata de acelerar las gestiones para así oficializar su pasaje a la Indy Car en
la próxima temporada 2018, tal como “Gonchi” Rodríguez allá por 1999, cuando
por primera vez un uruguayo corrió en la máxima categoría del automovilismo.
Con 21 años y múltiples
conquistas a cuestas, su mayor sueño es ganar la legendaria carrera de las 500
millas de Indianápolis…
Repaso
de algunas conquistas de Santiago Urrutia
2017
Subcampeón de la Indy Lights.
Subcampeón de la Indy Lights.
2016
Subcampeón de la Indy Lights, finalizando la temporada con 4 victorias.
Subcampeón de la Indy Lights, finalizando la temporada con 4 victorias.
2015
Campeón de la Fórmula Pro Mazda, cosechando 3 victorias en los autódromos de Indianapolis, Mid-Ohio, y Nueva Orleans.
Campeón de la Fórmula Pro Mazda, cosechando 3 victorias en los autódromos de Indianapolis, Mid-Ohio, y Nueva Orleans.
Es condecorado por la Federación
Internacional del Automóvil.
2013
Finaliza en cuarta posición en la Fórmula 3 europea (European F3 Open), con 2 victorias en la temporada.
Finaliza en cuarta posición en la Fórmula 3 europea (European F3 Open), con 2 victorias en la temporada.
2012
Termina en cuarta posición en el campeonato de la Formula Abath, con 3 victorias en la temporada.
2010
Gana el Campeonato Uruguayo de Karting 2010 en la Categoría Master y Campeón Federación en Categoría Máster.
Termina en cuarta posición en el campeonato de la Formula Abath, con 3 victorias en la temporada.
2010
Gana el Campeonato Uruguayo de Karting 2010 en la Categoría Master y Campeón Federación en Categoría Máster.
Viaja a Europa para competir en el
World Karting Championship.
2008
Campeón del Campeonato Argentino de Karting en la categoría Pre Junior y del Campeonato Apertura Metropolitano ProKart en la categoría Mini Junior
Campeón del Campeonato Argentino de Karting en la categoría Pre Junior y del Campeonato Apertura Metropolitano ProKart en la categoría Mini Junior
2007
Gana el Campeonato Apertura y Clausura del Metropolitano ProKart en Argentina.
Gana el Campeonato Apertura y Clausura del Metropolitano ProKart en Argentina.
2003
Campeón Latinoamericano de Motocross en la categoría para niños de 4 a 6 años.
Gana en la primera fecha de su primera carrera en karting, convirtiéndose en el piloto más joven en la historia del karting uruguayo en triunfar en una competencia
Campeón Latinoamericano de Motocross en la categoría para niños de 4 a 6 años.
Gana en la primera fecha de su primera carrera en karting, convirtiéndose en el piloto más joven en la historia del karting uruguayo en triunfar en una competencia
2002
Con los debidos permisos es autorizado a participar en carreras de karting, siendo el piloto más joven del karting uruguayo en empezar a competir, con 5 años.
Con los debidos permisos es autorizado a participar en carreras de karting, siendo el piloto más joven del karting uruguayo en empezar a competir, con 5 años.
2001
Con 4 años es el piloto más joven de la historia en ganar carreras en Tierra y Motocross del campeonato nacional, junto a niños de 6-7 años.
Con 4 años es el piloto más joven de la historia en ganar carreras en Tierra y Motocross del campeonato nacional, junto a niños de 6-7 años.
2000
Arranca a correr con apenas 3 años en el Campeonato Nacional de Motociclismo Velocidad en Tierra y Motocross.
Arranca a correr con apenas 3 años en el Campeonato Nacional de Motociclismo Velocidad en Tierra y Motocross.
¿De dónde viene ese
amor por las tuercas, cómo nace esa pasión por la velocidad?
Nací en Montevideo, pero ya desde que me dieron el alta viví y me crié
en Miguelete. En realidad, soy del campo, campo, un lugar entre medio de
Miguelete y Ombúes de Lavalle.
Mi familia se dedica al campo, hice la escuela en Miguelete y en Ombúes
arranqué el liceo hasta que me fui a vivir a Europa.
La pasión ya la tenía mi abuelo. El hecho de vivir en el interior y en
el medio rural te da otras enseñanzas, aunque creo que con la pasión un poco se
nace. Si bien mi familia me dio los primeros pasos, ya era algo que me gustaba.
Mi familia nunca me presionó a nada, seguí esta carrera porque era lo que
quería.
¿Tu abuelo qué hacía?
Mi abuelo nunca corrió, siempre fue un apasionado de los fierros. Tenía
campo y creo que por el tema de los tractores y eso, siempre se levantaba
temprano a ver la Fórmula 1, todos los domingos, nunca faltaba.
Nos regaló una motito a todos los nietos cuando tenía 3 años y ahí fue
que arranqué con las carreras de motos.
¿Cuándo
aprendiste a manejar entonces?
En moto a los 3. Y en camioneta, mi abuelo me sacó a manejar en medio
del campo cuando tenía 6-7 años. Lo hizo con todos los nietos. A mis primos más
grandes les enseñaba a dar marcha atrás, aunque lo mío era por derecha nomás,
jaj.
Y enseguida te
metiste en las carreras de karting…
Sí, pasé a los 5 años al kart. En un momento llegué a correr moto y kart
juntos, hasta que no me daban los tiempos, así que decidí dejar la moto y me
dediqué al karting. El karting es la cuna del automovilismo. Los campeones del
mundo, sean de Fórmula 1 o Indy Car, arrancaron en karting. Es lo mismo que en
fútbol, uno inicia en baby fútbol y va ascendiendo. Etapas que uno no se puede
saltear. Si bien hay casos que empiezan directamente en los autos y son muy
buenos, el karting es la base de todo piloto. Desde que arranqué a los 5 años
en las cuatro ruedas, nunca más paré.
Desde niño ya
sabías qué estabas para hacer, ¿cuándo decidiste meterte a fondo, dar los pasos
para ser un piloto profesional?
Cuando era chico, todo era como una diversión, como algo más, nunca lo
tomé en serio, si bien cada fin de semana iba a dar el 100 % y siempre fue mi
prioridad. Si había un partido de fútbol, lo dejaba de lado y priorizaba
siempre lo que era el karting. Comienzo a tomarlo de modo más profesional
cuando me fui a vivir solo con 14 años. En 2010, luego de correr el mundial de
karting, me surge la oportunidad de irme a vivir solo y correr toda la
temporada de karting en 2011. O todo lo que había hecho hasta los 13 años lo
tomaba, simplemente, como una experiencia de vida y me dedicaba a seguir la
vida normal, jugar al fútbol e ir al liceo. O apostaba al automovilismo. Decidí
apostar por el automovilismo con 14 años e irme a vivir solo.
Has
dicho que te aburre manejar en Montevideo, en la calle…
No me gusta manejar en Montevideo, porque el tránsito es un quilombo y
menos que menos en ruta. Depende de la situación, pero si nos vamos de
vacaciones con amigos en barra, prefiero que vaya alguno de ellos manejando y
yo disfrutando de ir conversando, de ir distraído, tomando mate, sacando fotos.
Prefiero no manejar, pero obviamente manejo todos los días, no tengo un chófer.
Cuando tengo reuniones o voy de acá para allá, no tengo otra opción y manejo.
¿Qué sensaciones
atraviesan el cuerpo cuando corres al mango en esas pistas de Europa y EE.UU.?
Para mí ya es algo normal, aunque es una adrenalina que no me lo genera
ninguna otra cosa. El automovilismo me produce algo tan especial que no me lo
genera ningún otro deporte. Por eso es mi pasión tan grande y dedico tanto
tiempo. Pero ya tengo acostumbrado el hecho de ir a más de 300 kilómetros por
hora en Indianápolis, por ejemplo, es algo normal, no me da miedo ni llama la
atención. Ya es algo que tengo incorporado. Y cuanto más rápido pueda ir,
mejor.
¿A
cuánto llegaste en velocidad, cuál ha sido tu pico acelerando?
352 kilómetros por hora, en el óvalo de Indianápolis. El límite, el auto
no daba más que eso, jaj Pero el auto está preparado para ir a esa velocidad y
también la pista. Es algo que ya tengo incorporado. Además, en la pista uno no
se da cuenta tampoco de que está yendo a esa velocidad.
Durante una
carrera, de repente vas en pista recta a fondo y llegás justamente a 300 km/h o
más, pero viene la curva y en segundos bajás a 70. ¿Cómo se entrena el cuerpo
para afrontar este tipo de cambios tan bruscos, ese impacto en el organismo?
Ahí lo más importante es el cuello, uno debe entrenar mucho el cuello.
Porque sí, venís a 300 y pico y en una desaceleración bajás a 60-70 en una
curva y todo en 100 metros. Por eso, es clave entrenar el cuello. Pero se te
hace habitual. Después de tres o cuatro vueltas en la pista, uno ya se la
memoriza, sabe dónde tiene que frenar y todo sale automáticamente. Al
principio, hay que agarrarle los puntos a la pista, pero una vez que los
conocés bien, ya automáticamente el cuerpo y la mente lo hace vuelta a vuelta.
¿Qué otros deportes
o pasiones tenés, por fuera del automovilismo?
Fútbol, juego mucho al fútbol, en Miami juego 2 y en ocasiones hasta 3
veces por semana partidos de fútbol 5 en un entrevero de amigos argentinos y
uruguayos. Cuando vengo a Montevideo, tengo un grupo de amigos de Ombúes, que
armamos este año un cuadro para jugar en la Liga de Montevideo y jugamos. Si
estoy dentro de temporada allá en Estados Unidos, cuando vengo para acá unas
semanas los acompaño, aunque no juego, por las dudas de alguna lesión. Pero
ahora que estoy de vacaciones, si me ponen juego. Fuera del auto, lo que hago
son rutinas en el gimnasio, por más que esté de vacaciones, intento de no
dejarlo. Y a veces juego al tenis. Dentro del automovilismo, el entrenamiento
físico no son más de 2 horas por día. Y en un fin de semana de carrera, uno
tiene que llegar por lo general un miércoles a la pista, cuando solamente
corrés el domingo. En tiempo, respiro el automovilismo las 24 horas, aunque
esté de vacaciones. Veo vídeos en Instagram, miro alguna carrera, acá en
Uruguay voy a entrenar en kart a San José, o el otro día me invitaron a correr
en Argentina, ahora hay carreras de karting en Montevideo y voy a correr. Es
algo que respiro todo el día, le dedico mucho tiempo.
Si no hubieses
encarado el automovilismo, ¿qué te hubiese gustado hacer?
Abogado o ingeniero agrónomo. Me hubiera gustado ser ingeniero agrónomo
por mi familia y por haberme criado en el campo. Y abogado porque me gusta el
poder, saber las leyes, ayudar a la gente.
Tu próxima carrera,
¿cuándo es?
Voy a correr en karting el 4 y 5 de noviembre en el Callejero, al lado
del Estadio Centenario, Montevideo. La pretemporada de la Indy Car arranca en
enero y el campeonato en marzo, así que para lo oficial, todavía falta.
Contame
un poco sobre la preparación de cara a una carrera, el encare físico y mental…
En cuanto a lo físico, me gusta mucho entrenar en boxeo. No peleo, pero
sí hago el entrenamiento de boxeo por el tema de los reflejos y porque tiene
mucho aeróbico No me gusta correr, me aburre, entonces hago bicicleta,
calentamiento en una cinta o prácticas del boxeo. Para el trabajo mental, se
hace un poco de simulador. Por lo general, previo a cada fin de semana de
carrera, una semanita antes se hacen algunas pruebas en la pista donde se va a
correr. También tengo mi psicólogo de todos los años, con quien me preparaba a
los 15 o 16. Hoy ya tengo una especie de escuela incorporada en el aspecto
psicológico y sé qué tengo que hacer cada fin de semana, cómo prepararme. Hay
momentos de crisis que uno sufre como cualquier deportista durante la temporada
y en ese momento es cuando más te apoyás en el psicólogo, para buscar
diferentes estrategias de concentración. Pero si va todo bastante bien como uno
lo planea, lo importante siempre es estar frío. En el automovilismo hay
que ser muy frío, nunca hay que demostrar mucha felicidad, ni debilidad frente
a los rivales. Eso ya lo aprendí y lo manejo bastante bien. En ese sentido,
mentalmente hasta ahora no he tenido mayores problemas.
¿Hacés alguna
técnica de relajación u otra actividad inmediatamente antes de la largada?
No, tampoco tengo cábalas, sí tengo como una especie de orden mental.
Cada vez que me subo al auto, siempre entro con el pie derecho y después de que
me ajustan los cinturones, me pongo siempre el guante derecho antes que el
izquierdo. Pero no es una cábala, es simplemente algo que uso para ordenarme
previo a cada carrera.
¿Sos de escuchar
música antes de una carrera?
Sí, sí, escucho. Una hora antes más o menos, me encierro en el camión y
quedó en mi mundo. A veces ni escucho, estoy ahí con el teléfono. Trato sí de
aislarme un poco de lo externo, de no hablar con la gente ni andar caminando
por ahí. Me enfoco más bien en lo mío.
¿Qué escuchás en
esos momentos previos?
Un poco de todo. Previo a una carrera me gusta escuchar música en
inglés, bastante tranqui o rock y esas cosas. Fuera de la carrera, escucho de
todo, cumbia uruguaya, cumbia villera, reggaetón, puedo escuchar cualquier
cosa.
¿Qué se siente
cuando estás en el punto de largada, a punto de acelerar?
Ese es el momento de un poco más de nervios… Ya en el momento que pasa
la largada, se calma todo. Siempre los minutos previos a la carrera, antes de
que arranquen los motores, es el momento de mayor tensión y nervios.
Más allá del
orgullo personal y el reconocimiento de la gente, ¿sentís que seguir tu meta ha
sido también un sacrificio?
Creo que quien quiere seguir una carrera, sea automovilismo o cualquier
otra, debe hacer su sacrificio y dejar cosas de lado. Obviamente, lo mío tiene
pros y contras. El hecho de ser un deportista, uno se hace conocido, tiene que
cuidar su imagen. Me gustarían hacer muchas cosas que hoy en día no puedo, pero
no es que no esté contento con lo que hago. Estoy haciendo lo que siempre quise
desde chiquito y lo vivo de la mejor manera. Estoy disfrutando de la vida, creo
que lo principal es disfrutar. Si uno disfruta, pasa bien y le salen bien las
cosas. Por eso, no me quita el sueño si, por ahí, una noche me tengo que
acostar a dormir y justo hay tremenda joda entre mis amigos. No tengo ningún
problema, ya lo tengo más que asumido…
¿Y más de guacho?
Y al principio, me costaba un poco. Ojo, estando de vacaciones no es que
me prive de mucho. Si tengo que salir una noche salgo, como una persona normal,
porque me considero una persona normal, más estando de vacaciones acá en
Montevideo. Si pinta salir, salgo, sin problema. Pero no salgo todos los fines
de semanas, intento cuidarme. Prefiero juntarme con algunos amigos y amigas a
hacer un asado en casa y quedarme a dormir, antes que salir a una discoteca.
¿Es necesario que
cuides la alimentación o …?
Sí, durante el año me cuido mucho. Estando de vacaciones, no. Si me
relajo un mes, ya después tengo que volver a entrenar y a comer bien enseguida,
si no engordo mucho y no puedo irme mucho de la línea, jaja. Hoy almorcé un
pollito con ensalada. Tengo que evitar las gaseosas y las cosas fritas. Y lo
que hago es no parar de hacer deporte, no tan intenso como cuando estoy en
temporada, pero por lo menos jugando una vez al fútbol con mis amigos, o yendo
al gimnasio.
¿Sentís mucho la
autopresión? ¿Cómo llevás ese grado de exigencia que un deportista de tu
estatura quizá tenga consigo mismo?
La presión se la pone uno mismo en querer ganar todo el tiempo. La
presión de afuera nunca la siento, no me entero ni interesa. Es una autopresión
de querer ganar y uno entrena, entrena y si llega el fin de semana y no salen
los resultados, entonces uno piensa: Pa, qué podrá ser, me equivoqué
acá o allá… La presión siempre es personal, de mejorar día a día. Y
si la carrera no sale bien, igual estar tranquilo cuando te vas a dormir, de
que diste el 100 % durante la semana o días de entrenamiento y que si no se dio
será por algo y quizá el fin de semana que viene, se van a dar las cosas…
¿Cómo te pega la
derrota?
La derrota siempre dicen que es la mejor enseñanza. Cuando uno pierde,
aprende mucho más que cuando gana. Y perder, he perdido un millón de veces,
estoy acostumbrado. Hay derrotas y derrotas, algunas no te duelen y otras
duelen y te pegan y demorás en levantarte. Son aprendizajes y es parte del
deporte. Cada fin de semana somos 16-17 pilotos corriendo y sólo uno es felíz:
quien gana. Así que uno tiene que estar acostumbrado a eso.
¿Cómo fue el
recorrido para acceder a competir en la Indy Lights ?
El proceso es karting, ganar carreras y campeonatos. Eso ayuda a ir
ascendiendo. O haberme comunicado con gente experiente, que me hizo dar los
mejores pasos e irme a Europa desde chico. Eso me ayudó mucho, criarme en
Europa, que es la cuna del automovilismo. Pero no existe una receta de cómo
llegué hasta donde estoy hoy en día ni una escalera exacta para llegar a lo
máximo. No es que haya que hacer esto y esto para obtener aquello. Año a año
uno va definiendo su carrera deportiva y el destino te va llevando a un lugar. Mi
idea era quedarme en Europa y terminé estando en Estados Unidos. Hoy en día mi
idea es quedarme en Estados Unidos por muchos años corriendo en la Indy Car. Pero
sin duda que para haber llegado a donde estoy ahora, hay que ser competitivo,
ganar carreras y estar siempre en el ruido de las primeras posiciones cada fin
de semana.
Debe
ser bravo remarla y conseguir el dinero que se necesita para competir en las
grandes ligas…
Y sí, somos un país chico, pero donde no me puedo quejar. En base al
país que tenemos, cuento con un gran apoyo estatal y privado, de empresas y de
la gente. Sobre todo, el apoyo de la gente, creo que ningún piloto hoy en día
en el nivel que estoy yo lo tiene. Los seguidores que tengo son muchos y eso
sirve muchísimo, porque me hace bien a mí, sirve dentro de Estados Unidos
contar con ese aliento… La guita, sí… Es un tema que a final de temporada
se habla, tengo que venir a Uruguay por reuniones, a juntar el presupuesto para
el año siguiente. Es parte del automovilismo y ya lo vivo desde hace bastante,
ya estoy acostumbrado.
¿Cuál es tu circuito
favorito y por qué?
Mid-Ohio, porque de 3 años que estoy corriendo en Estados Unidos, voy 6
carreras y mi peor resultado ha sido tercero. Es una de mis pistas favoritas.
Espero que si llego a firmar para la Indy Car también me vaya bien y pueda
meter un podio ahí el año que viene.
Tu primera victoria
de la temporada fue ahí, en Mid-Ohio, donde subiste a lo alto del podio. Ganar
así y ahí, de primera, arrancar impecable, ¿cómo se siente, eso te embala, o
siempre lográs mantenerte cauteloso?
Personalmente, me potencia, me levanta bastante. Pero en el
automovilismo, como dije, personalmente considero que uno no puede mostrar
mucha felicidad, ni tristeza o bajón cuando pierde. El que es frío en el
automovilismo hace la diferencia. Si ves los grandes campeones, la mayoría son
todos fríos, esa es una de las claves para triunfar.
¿Cómo
es el ambiente del automovilismo? ¿Son amigos con algunos de los rivales, o
mejor cada uno en su cabina?
No tengo ningún amigo dentro del automovilismo, ni uruguayo ni nada, nadie
a quien considere amigo de verdad y le tenga confianza. Menos que menos dentro
de Estados Unidos. Sí con mi ingeniero, una persona muy honesta y tengo
excelente relación con su familia. Pero no me interesa ir un fin de semana de
carrera para tener confianza o armar amistades. Voy, simplemente, a ganar
carreras…
En la tuya…
Lo mío, exactamente y listo. Es lo único que me importa.
¿En algún momento
barajaste la posibilidad de dejar de correr?
Sí, el año pasado, cuando perdí el campeonato y me hicieron esa trampa…
Analicé dejar de correr. Y en 2014, cuando fue mi peor año en Europa, tampoco
tenía muchas ganas de seguir, aunque siempre encontré una motivación para
seguir corriendo. Nunca dije: Listo, no corro más.
Ni me quedé sentado en el sillón de mi casa sin intentar nada. Pensé en
dejarlo, pero seguía haciendo algo como para seguir corriendo. Siempre
reaparecía una motivación para poder seguir.
En
2015 ganaste en la fórmula Pro Mazda, en el circuito de Laguna Seca,
California, el Gran Prix de Monterrey, donde corrió y falleció Gonzalo
Rodríguez.
¿Cómo hace un piloto para mantener la cabeza fría, sin miedo a los accidentes?
¿Cómo hace un piloto para mantener la cabeza fría, sin miedo a los accidentes?
Al principio, ese día fue raro. Cuando caminaba por la pista y me
encontré con esa curva, me llamó la atención, con todo lo vivido… Ahí habían un
par de sentimientos encontrados. En el momento que la encaré en el auto y con
el casco puesto, ni pensé en “Gonchi”. Pensaba en la carrera, pensaba en ganar.
Y cuando gané el campeonato, parar ahí en la curva, donde justo había un montón
de uruguayos apoyando y yo venía con una bandera uruguaya, poner el auto al
corte, festejar ahí en la curva del “Gonchi”, eso sí fue muy emotivo. Creo que
“Gonchi” estuvo ese día con nosotros, acelerando, con la mejor garra desde allá
arriba. Pero no podía enfrentar la carrera con miedo, porque era algo que me
iba a jugar en contra. Lo enfrenté como si fuera una cuerva normal, desde un
principio en el auto. Y terminó siendo una curva normal y una pista que
me dio un campeonato muy importante dentro de mi carrera deportiva.
Jamás sentiste
miedo a la velocidad.
Nunca. Nunca sentí miedo, jamás. No se puede sentir miedo en el
automovilismo. Sí sentí miedo a veces, si por ahí no conseguía el presupuesto,
por no poder correr más.
Pero dentro de la pista nunca.
Pero dentro de la pista nunca.
Saliste
sub campeón en la última carrera de la Indy Lights, en el autódromo Watkins
Glen, bajo lluvia. ¿Cómo es correr con el clima en contra?
Durante la lluvia un piloto tiene que encontrar el rumbo. Sin dudas que
el auto tiene que ayudar, pero es el piloto quien tiene que encontrarlo. Las
últimas veces que he corrido con lluvia, me ha ido muy bien. Cuando llegué a la
Pro Mazda, corrimos una carrera bajo agua y la gané. En 2016 hubo otra bajo
agua y la gané también. Y este año, en Argentina me invitaron a correr, nos
tocó con lluvia y salimos terceros (en la carrera “200 km de Buenos Aires” del
Super TC 2000, junto al piloto mendocino Berni Llaver). Correr con lluvia es
una condición que me gusta. Es un factor muy difícil, a veces llueve mucho y
otras poco, pero se hace siempre entretenido.
En
agosto de este 2017 conquistaste un triunfo histórico, siendo el primer
uruguayo en ganar en un óvalo de Estados Unidos. ¿Qué otros triunfos como
piloto recordás con especial alegría?
Mi primer triunfo en Europa en 2012, el campeonato argentino de karting
en 2008 y el campeonato de Pro Mazda en 2015. Son las victorias que más me
marcaron. No sé bien por qué, pero el que más me marcó fue ese campeonato
argentino de karting en 2008. Fue un torneo muy especial, muy luchado y
difícil. Gané muchos campeonatos en Argentina, pero ese me quedó. Soy el único
piloto extranjero en la historia de los campeonatos argentinos en haber ganado,
el resto son todos argentinos. Tuvo algo especial, fue un campeonato que lo
corrí bien, no cometí errores.
Al culminar segundo
en la última carrera de la temporada de IndyLights, cerraste 2017 del mismo
modo que el año pasado, siendo subcampeón de la categoría. ¿Año redondo?
Redondo hubiese sido ganar el campeonato. Penalicé muchísimo con los
problemas de motor que tuve a principio de año. Pero así es el automovilismo.
Son fierros, a veces se pueden romper, son cosas que pasan, y bueno, no se dio
de ganar el campeonato, pero igualmente fue una gran temporada y ratifiqué lo
que hice el año pasado.
¿Qué tan cerca
estás de correr en la Indy Car en la próxima temporada, qué falta?
Ahora tengo que volver para Estados Unidos… Y estoy cerca, como al mismo
momento estoy lejos. Porque lo único importante es ponerle la firma al
contrato. En el momento en que firme estaré confirmado 100 %. Más o menos de
palabra está todo arreglado, pero hasta que no lo tenga firmado no voy a poder
decir nada. Los términos de negociaciones para la Indy Car, donde se encuentran
los más grandes del automovilismo en Estados Unidos, llevan su tiempo, hay
abogados, contadores, no es solamente un contrato de dos o tres hojas, sino que
muchas cosas que uno debe tener cuidado. Estamos haciendo todo para firmar lo
antes posible.
Además
de soñar con competir en la Indy Car y ser el más rápido del mundo, ¿con qué
más soñás? ¿Qué otros planes tenés?
Llegar a la Indy Car, ganar las 500 millas de Indianapolis, ganar el
campeonato de la Indy Car, correr por muchos años ahí, quedarme a vivir en
Estados Unidos y venirme de vacaciones a Uruguay. Y después se verá, qué depara
el futuro.
PING
PONG con Santiago Urrutia
¿Algunos de los
mejores vehículos que hayas manejado?
BMW M4.
¿Qué autos te
encantaría manejar?
Si hoy o mañana tengo la posibilidad y me tuviera que dar un gusto en un
auto, sería un Ferrari.
Algún lugar en
Uruguay donde te gustaría vivir.
Campo y Miguelete. Y me gustaría tener un apartamento en Montevideo.
Una experiencia
salvaje que hayas vivido dentro o fuera de un auto.
Salvajes tengo muchas, como de chico cuando tirábamos bombitas de agua y
nos perseguía la policía en el pueblo. Y otras en Estados Unidos o Europa,
sobre todo por haber vivido solo. Desde que me fui a los 14 siempre viví solo.
En 2014 mi madre vivió conmigo 4 meses, pero después siempre solo, nunca
acompañado de nadie, entonces uno va aprendiendo y se va criando a los
“pechasos”.
¿Tenés vínculo con
algunos otros deportistas uruguayos?
Con Gastón “Tonga”
Reyno, Pablito Cuevas y también
con varios futbolistas. A quien más conozco y es como un hermano es el “Tonga”,
que vive en Estados Unidos y nos apoyamos, voy a sus peleas y él viene a mis
carreras.
Tony Kanaan…
Un fenómeno, lo conozco, vive en Miami, nos hemos cruzado un montón de
veces en la pista. Ya está en las últimas etapas de su carrera, pero es un
piloto con experiencia y talento, a quien le tengo mucho respeto. Ganó la
carrera más importante del mundo, las 500 millas, ganó el campeonato de la Indy
Car.
Berni
Llaver…
Compartimos ahora la carrera de los 200 kilómetros de Buenos Aires, un
excelente piloto y una gran persona que con mucho sacrificio llegó hasta donde
está hoy en día y creo que tiene un gran futuro dentro del automovilismo
argentino.
“Gonchi” Rodríguez…
En Uruguay “Gonchi” va a ser siempre “Gonchi” y el número 1. Quienes
arranquen en el karting, el “Gonchi” será su referente. Y ellos van a ser
comparados con “Gonchi”, yo siempre seré comparado con “Gonchi”, así llegue a
la Indy Car y corra 10 años o 20 y gane carreras y campeonatos, “Gonchi” estará
siempre en el escalón de más arriba, porque siempre va a ser el número 1.
Ayrton Senna…
El número 1 del automovilismo, está
en la historia y nadie lo va a mover, por más que venga un Schumacher, que ganó
7 campeonatos del mundo, es un fenómeno y todo, o como Hamilton hoy en día, que
ganó 4, pero Senna será siempre Senna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario